miércoles, 30 de diciembre de 2015

Doce Campanadas para terminar el 2015


Doce Campanadas para terminar el 2015


Estamos a unas cuantas horas de terminar el 2015, y aunque lo usual sería hacer un recuento de eventos y experiencias, en esta ocasión he preparado un sencillo regalo de fin de año. Invirtiendo varias horas de dedicado y minucioso estudio, hice una recopilación con las más profundas reflexiones de conocidos y populares pensadores. Todas ellas me han acompañado en diferentes momentos de la vida, y estoy seguro que tu también las has oído alguna vez, aunque al principio te cueste trabajo recordarlas. En caso de que no las reconozcas, al final puedes encontrar la fuente de cada lección de vida, por si quieres profundizar en los textos originales. Va pues este sencillo regalo con mucho afecto: Doce pensamientos en doce campanadas. Que haya vida y que haya amor para ti y para los tuyos. ¡Salud!
 

1. “Los caminos de la vida no son como yo pensaba, como los imaginaba, no son como yo creía”

Hoy vivo donde menos pensé que viviría, y trabajo donde nunca imaginé que lo haría. Hay que tener sueños, planes y proyectos, pero también hay que estar abiertos a las oportunidades, porque al Creador le gusta abrir caminos donde y cuando menos lo esperas.


2. “Lo que un día fue no será”

No te aferres. Déjalo ir. Si tiene que llegar, llegará. Si no, vendrá algo mejor. O cómo se dice por ahí: cuando te toca, aunque te quites; y cuando no, aunque te pongas.


3. “Sé que aún me queda una oportunidad, sé que aún no es tarde para recapacitar”

¿Algo que arreglar? ¿Alguna disculpa que pedir? ¿Alguna llamada por hacer? ¿Algún abrazo que dar? ¿Por qué no dejas de leer y lo haces? Aquí te espero. El texto no va a ningún lado.
 

4. “Que cambie todo pero no el amor, nuestra familia es más importante, ya lo sé. Y la debemos proteger y volver a tejer”

Si tienes una familia que es cómplice, un poco desordenada, que acepta a todos como son, incluyendo a los nuevos miembros, siéntete afortunado. Si además saben reírse unos de otros y unos con otros, y a la menor provocación empiezan a jugar o cantar, si están al pendiente unos de otros siempre, aun de los que están lejos, siéntete bendecido.
 

5. “Los demás podrán tener lo que quieran, pero jamás tendrán lo que tengo yo”

No te compares con nadie más que contigo mismo. ¿Eres un mejor tú? Bien logrado. ¿Estás en camino de hacerlo? No desistas. ¿Te quedaste a deber? Pues a darle… para atrás ni para tomar vuelo.
 

6. “Sólo si diste algo, algo podrás recibir, y el amor que esperas sólo, sólo depende de ti”

En el plano humano, nadie cosecha lo que no siembra, ni sabe cuando cosechará lo sembrado. Así es que, a dar, a sembrar y a silbar una melodía mientras lo haces. Tarde o temprano todo regresa multiplicado.
 

7. “Son aquellas pequeñas cosas que nos dejó un tiempo de rosas, en un rincón, en un papel o en un cajón”

Mira a tu alrededor, abre los ojos, déjate sorprender. La cosa es querer ver, diría un amigo mío. Ahí en los pequeños detalles se construyen los recuerdos y se esconde la felicidad.


8. “Deja el rencor para otro tiempo y echa tu barca a navegar”

Quítate ese horrendo lastre del rencor, no ganas nada guardándolo. Si lo dejas ahí, se va a enquistar y va a crecer. Mientras te preocupas por el lastre, estás perdiendo de vista el paisaje del viaje.
 

9. “Y ya verás, las sombras que aquí estuvieron no estarán. Y ya verás, que no necesitaremos nada más. Y dale alegría, alegría a mi corazón: Es lo único que te pido al menos hoy”

Escribo siempre con la ilusión de sembrar un pensamiento positivo o al menos lograr arrancarte una sonrisa de vez en cuando. Deseo que sonrías mucho todos los días, tanto así que, cuando seas abuelo o abuela cada una de tus arrugas sea motivo de orgullo porque representan alegres recuerdos.
 

10. “Saber que se puede, querer que se pueda, quitarse los miedos, sacarlos afuera”

¿Por qué no te animaste a hacerlo? ¿Cómo sabes que no se puede? ¿Por qué crees que no se puede? ¡Échale! ¡No te quedes con las ganas!

¿Ya lo intentaste? ¿Y sólo porque no salió a la primera tiras la toalla? ¡Échale! ¡Venga el segundo round!

 
11. “Óyelo, escúchalo, te está buscando amigo. Óyelo, escúchalo, te está buscando a ti.”

Eso, eso, eso, eso. Abre tu alma, tu corazón. Soy testigo de esta verdad: nunca te deja, nunca te abandona, siempre está para ti.

 
12. “Siempre seguí la misma dirección, la difícil, la que usa el salmón"

¿Y quién dijo que era fácil? Hay que tupirle, hay que nadar contracorriente, hay que esforzarse, hay que vencerse a sí mismo, hay que poner de uno mismo toooodooos los días.
 

Fuentes:

 

1. “Los caminos de la vida”, La Tropa Vallenata, Álbum: Los Caminos de la Vida, 1996

2. “Lo que no fue no será”, José José, Álbum: Lo pasado pasado, 1978

3. “Con los años que me quedan”, Gloria Estefan, Álbum: Mi Tierra, 1993

4. “La vida es un ratico”, Juanes, Álbum: La vida es un ratico, 2007

5. “Personajes”, Los Claxons, Álbum: Sin Ganga, 2006

6. “Por el resto”, Enanitos Verdes, Álbum: Habitaciones Extrañas, 1987

7. “Aquellas pequeñas cosas”, Joan Manuel Serrat, Álbum: Mediterráneo, 1971

8. “Vive”, Napoleón, Álbum: Vive, 1976

9. “Y dale alegría a mi corazón”, Fito Páez, Álbum: Tercer Mundo, 1990

10. “Color Esperanza”, Diego Torres, Álbum: Un mundo diferente, 2001

11. “Óyelo, Escúchalo”, El Chavo, Álbum: ¡No contaban con mi astucia!, 1976

12. “El Salmón”, Andrés Calamaro, Álbum: El Salmón, 2000

 


Twitter: @gmomtz

 

Textos anteriores: http://columnamusicopoetayloco.blogspot.mx/




---------------------------------------------



Publicado el 30/12/2015 en: www.antenasanluis.mx


http://antenasanluis.mx/doce-campanadas-para-terminar-el-2015/

 
 
 

 

miércoles, 23 de diciembre de 2015

¿A qué te sabe la Navidad?


¿A qué te sabe la Navidad?

 
A mí me sabe a regreso. Hace ya unos cuantos años salí de mi ciudad natal. Por eso, Navidad me sabe a las calles de mi infancia, a casa de mi mamá, a caminar por el centro. Sabe a frío seco en la sombra y a sol picante a la intemperie. Sabe a quitarse y ponerse el suéter al menos 4 veces a lo largo del día.  Sabe a panadería para las tortas del recalentado, a gorditas de horno en fin de semana, a enchiladas y chocolates que solo se encuentran aquí. Sabe a agua mineral. Pero mineral en serio, no gasificada. Y por supuesto, sabe a un buen whisky con esa agua.

Me sabe a tradiciones. A posada de verdad, con panderos para los niños y villancicos entre misterio y misterio. A caña, guayaba y mandarina, y luces de esas montadas en un alambre que cada año duran menos prendidas. A las tías que cuidan los peregrinos mientras pedimos posada porque los tienen que cargar los más pequeños de la casa. Me sabe a los de afuera y a los de adentro, que siempre agarran diferente tono para cantar la pedida de posada. Me sabe a ponche con fruta y tamales calientes.

Me sabe a recuerdos, a muchos recuerdos. A aquellos de niño cuando creía en la magia, y estaba seguro que algo llegaría para mí. Hoy sabe mucho a aquellos que ya se fueron, pero que nunca han dejado de estar. Sabe, por supuesto, a cambios, porque además de los que ya no están, las familias crecen y nuevos actores entran al escenario.

Pero sobretodo me sabe a encuentro: A abrazos, apretones de mano, a pláticas de sobremesa, a interrumpirnos unos a otros porque tenemos mucho que contarnos y poco tiempo para hacerlo.

¡Que bueno que nos invitaste a tu fiesta de cumpleaños Señor! Entre todos estos sabores no quiero dejar de felicitarte y darte gracias. Vamos pues, a saborear estos días y el encuentro contigo y con nuestra gente. ¡Salud!

 

De verso en verso: Siempre Tú

Siempre Tú, nos cambias la jugada,
siempre Tú, volteas la última carta.

Para mostrar tu poderío
pusiste un Rey dentro de un niño

Para salvar nuestro destino
en prenda diste tú único Hijo.

Siempre Tú, palabra en el silencio.
Siempre Tú, silencio que retumba.

 
 
La nota musical.

Algunas personas me preguntan porque sigo guardando mis canciones en mi iPod. La respuesta es sencilla: muchas de mis canciones favoritas son poco comunes, poco populares, muy viejas, muy locales o una combinación de todo eso. Por lo tanto, no están disponibles en los servicios en línea. Este es el caso de una de mis favoritas que hoy les comparto:

Que la mesa reúna ilusiones
y detalles de un mismo vivir.
El sabor del encuentro y la fiesta
crecerá como masa de pan.

Las fuerzas se rehacen en la mesa
se olvidan los silencios sin razón
se escucha una nueva palabra
con la mirada en torno al pan
en torno a Él.

"En torno al pan", Kairoi, c. 1980


Twitter: @gmomtz

 

Textos anteriores: http://columnamusicopoetayloco.blogspot.mx/

 
---------------------------------------------

Publicado el 23/12/2015 en: www.antenasanluis.mx


 
 
 

 

miércoles, 2 de diciembre de 2015

En defensa del Trinomio Cuadrado Perfecto


En defensa del Trinomio Cuadrado Perfecto

El Trinomio Cuadrado Perfecto, mejor conocido como TCP, es el resultado de elevar un binomio al cuadrado. En mis tiempos de estudiante de secundaria, era el primero en la lista de los famosísimos “productos notables”, y en ese entonces, el maestro nos obligaba a memorizar y a recitar el “modelo” cada vez que elevábamos un binomio al cuadrado: “el cuadrado del primero más el doble producto del primero por el segundo más el cuadrado del segundo”. Hoy día, claro, no se dice memorizar y recitar, va en contra de los sanos principios pedagógicos. Hoy día se busca que el conocimiento semántico tenga puntos de enlace con el conocimiento procedimental mediante la aplicación de modelos comunes algebraicos… para que vean que si estudié.

Pues resulta que ya tiene un tiempo que me ha tocado ver en redes sociales una campaña denigrando al inocente TCP, situación que me parece una totalmente discriminatoria y llena de ingratitud. Acá mis argumentos en defensa en un indefenso:

Primero: Gracias a Dios, a los héroes que nos dieron Patria y a la democracia, nadie define nuestro futuro, trabajo o profesión cuando entramos a la secundaria. Imagínense si así fuera: “A ver tú, niño, que vas a ser abogado, ya no necesitas cursar biología”; “Tú, niña, que serás Química, ya no debes cursar Historia”; “Tú el grandote de allá, que va para guarura, ya no curses Civismo ni Español”; “Tú, el muchacho del copete, que vas a ser presidente, ya no lleves lectura, ni redacción, ni inglés… ni nada… mejor vete a recreo”; “Tú que vas para doctor, ya no curses caligrafía”. La secundaria nos regala una cultura general, conocimientos básicos que requerimos para enfrentar posibilidades. Si estás llegan a materializarse o no, depende de otros factores. Quien sabe si Rodolfo Neri hubiera llegado al espacio si hubiéramos decidido eliminar el TCP del programa de estudios.

Segundo: Aunque existen secundarias técnicas, su objetivo no es competir con las escuelas de artes y oficios. No todo lo que recibimos en la secundaria está diseñado para ser usado. Yo, por ejemplo, jamás he vuelto a disectar un ser vivo, ni a realizar una proyección isométrica de un prisma de base pentagonal. Mucho de lo que recibimos tenía por objetivo entrenar nuestra mente para procesos mentales superiores. Yo no oigo a Messi quejándose antes de un partido: “Un día más sin usar las sentadillas para meter un gol”, o a Paquiao antes de una pelea: “Un día más sin noquear a alguien brincando la cuerda”, o a Tom Brady: “Un día más sin levantar pesas para tirar un pase de touchdown” ¿Verdad que no? ¿Verdad que ahí si nos queda claro la importancia del entrenamiento, la repetición y la preparación? El uso del TCP entrena nuestra mente (¡agárrense!) en procesos mentales como análisis, síntesis, clasificación, generalización, priorización y secuenciación. El TCP es a los procesos mentales, como las sentadillas, lagartijas y abdominales para los deportistas. Así es que cuando te quejas de él, suenas como el futbolista que echó panza por confiarse de su “toque”.

Cierro esta defensa deseándoles que lean mucho, escuchen música a diario, y resuelvan algún problema de lógica o álgebra de vez en cuando. ¡Salud!



La nota musical.

Con nostalgia cierra una época en la vida de muchos mexicanos: se termina “En Familia con Chabelo”. Miles de papás enfiestados de sábado agradecieron por décadas su existencia. Hay quienes dicen que es el final de una época en la televisión mexicana. Hay otros dicen que sólo es el final de la primera temporada, que nos estamos preocupando de más. Jajaja.


En el patio grande
está la bandera,
le canté bien fuerte
para que me oyera.

Mi maestra me dio un beso a la salida
porque hice los palitos parejitos,
y me puso un garabato colorado
que parece que le gusta a mis papitos.


"Garabato Colorado", Chabelo.

 

Twitter: @gmomtz

 

Textos anteriores: http://columnamusicopoetayloco.blogspot.mx/

 
---------------------------------------------
Publicado el 02/12/2015 en: www.antenasanluis.mx